¿En qué mundo vivimos, Eva? Siempre he sido un amante de aquel mundo
analógico donde cada cosa tenía su valor por ser original; y ahora, Eva, me
siento triste, todos son copias del otro como copias hechas por una máquina sin
corazón, me siento triste, Eva.
A veces ando por ahí pensando en nada y, de rato en rato, en
el pasado, en aquellos paseos por el centro, como aquella película, Eva, te
acuerdas; ahora el viento sopla y rompe todo a su encuentro, es difícil, Eva,
es difícil seguir acá si tú no estás.
Estás tan quieta y tan callada, Eva, que a veces tengo miedo
de interrumpir tus pensamientos, cuéntame cómo funciona el Mundo, Eva, cuéntame
cuándo volveremos a casa que aún hay mucho que quiero mostrarte, aún tengo muchas
cosas que contarte.
…Y el otro día corrí, corrí como nunca antes,
antes de que la lluvia empiece,
antes de que el sol se oculte,
antes de que vuelva a perderte…